Para muestra, un 'Potón'

foto: ANDINA

Universitario evidenció que se había leído seis tomos de este Alianza 2009 y le memorizó hasta la marca del chimpún. A los de Reynoso les bastó aprisionar a Montaño para deshacer a una blanquiazul inofensiva y a la deriva. El Título no se nos puede ir así.


Bruno Ortiz Jaime


Entró solo a la habitación porque sabía que ningún obstáculo estorbaría esta vez. Con la misma pierna fatigada por doblegar al más feroz de sus cancerberos se encargó de eliminar uno a uno a los demás. Universitario carcomió como un asesino, de a pocos, al colombiano Montaño, sin descubrir la pólvora, el eje de este Alianza; y rascó la olla para sacar la diferencia necesaria. Con una mente distinta, y el estudio milimétrico de sus hombres, el visitante supo absorber a un oponente temerario. Ahora habrá que buscar fuera de casa lo que no se puede producir en ella.

Con las defensas bajas

¿Vale de mucho complicarse en este tipo de partidos? El fondo blanquiazul tuvo, no pocas veces, hasta el desparpajo de jugar la bola al límite en situaciones mortales. Sin siquiera el dominio necesario del balón, el fondo se dio lujos innecesarios, suficientes como para darle cabida a los simpáticos delanteros rivales. En el medio, la idea casi de videojuegos por parte de Costas, aquella de colocar a un desenfrenado González-Vigil como perro de presa en la mitad de la cancha no sirvió esta vez. No podía jugarse al secreto con ello -era obvio por lo hecho por el ‘Lobo’ ante Vallejo- y tampoco el correr significa marcar mejor. En el gol, más de uno se quiso comer a Fleitas, que descuidó infantilmente la marca de Alva.

Perdí mi oportunidad

A pesar de ello, Alianza tenía cómo. Por algo le preocupaba al técnico visitante los arranques de Aguirre por izquierda. El ‘Zorrito’ tuvo más de una ocasión de mandar a gatear a Revoredo pero a su ya conocida carencia de argumentos técnicos se le sumó una aterradora cobardía. A su vez, Sánchez se hizo transparente por un buen tramo del encuentro y solo generó algunas faltas. Era sin duda el efecto anti-Montaño lo que estaba derrumbando el andamiaje grone.

Qué daño, Montaño

Con bombos y platillos, por los medios y hasta entre susurros. A la marca para el colombiano solo le faltó una conferencia de prensa. Ni el acompañamiento de dos hombres de buen pie como Quinteros y Sánchez fue suficiente para desahogar al ‘Potón’. Cuando lograba servir, la lentitud de Aguirre era tal, que el trabajo se facilitaba en el fondo merengue; o cuando se libraba no encontraba con quien tocar. La actuación de Johnnier esta tarde fue impensable.

Tampoco como excusa…

La actuación de Fernández, si bien fue notable, no dejó argumentos para González-Vigil. El 'Lobo', que terminó de atacante, volvió a comerse un tanto increíble, como lo hiciera la semana pasada ante César Vallejo: cabeceando solo frente al arco con una deficiencia vergonzosa para un hombre de área. Corzo y Ovelar también tuvieron ocasiones, que por nervios en demasía o falta de fineza, no concretaron. Si bien el golero crema se jugó un partidazo, Alianza sacó esta tarde una muestra gratis de su inanición goleadora.

Lo que se viene

Tampoco hay que morirse, ¿verdad? El sistema nos ha descartado apenas al 50%, pero ahora es cuando Costas debe sacar a flote su astucia e inteligencia de cara al planteo. Ya van tres que la hace Caperucita Roja este año y no puede permitirse una más. Los regresos de Jayo y Forsyth son casi una obligación. Y si el argentino es algo más calmo, reparará en que este Universitario arañará el empate a como dé lugar. Claro, disfrazando sus intenciones con ataques cargados de vigor y energía. Alianza deberá aprender a transitar la extensión del Monumental y el café cargado en el camarín debe venir impregnado de estrategia. La cabeza caliente está para la tribuna, no para los uniformados.