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A horas de la conocídisima masacre venidera, saquémosle una sonrisa nerviosa al alma. ¿Recuerdas la última vez que Perú sacó un resultado que no sea derrota -y que no sean en Play Station- en su visita a Brasil? No fue tan lejano, ocurrió en abril de 2001. Como para que nosotros, los que aún no pintamos canas y tenemos este recuerdo como único vestigio, le hagamos un monumento, por nuestra situación a actual, a Uribe, Tempone, Juan Pajuelo y Cía.
Bruno Ortiz Jaime
En primer lugar, no está tan demás un poco de catarsis inicial. Cierre los ojos e imagine, no solo a esta selección de Del Solar, sino en general, todas las situaciones de desilusión que hemos pasado vestidos de blanquirrojo. ¿Cuántas veces logramos engañarnos, pese a incontables razonamientos? Es por eso que el destino de este fútbol es la gitanería: ganamos los imposibles y perdemos los imperdibles, dirían algunos (no pocos).
Pero, ahora, tras largos años de telenovela, tenemos la certeza de una derrota. No hay manera, coincide la mayoría. Aunque curiosamente, sobren un par de entusiastas sin causa y puteadores espontáneos que aseguran que "Perú siempre le hizo buenos partidos a Brasil y tenemos chance". No es broma, eso dijeron.
Y está bien, sí. En este país, la tierra natal de "Papalindo, ayúdanos", no sobran los triunfos y hay que ver mil veces los goles de 'Cachito' en Buenos Aires y la 'folha seca' de Cubillas. Por eso es preciso, lo "justo y necesario", recordar a aquellos once luchadores, a aquella valerosa escuadra del honorabilísimo y no poco pintoresco Julio César Uribe que logró empatarle un 25 de abril de 2001 a un Brasil parchado -sí, pero Brasil es Brasil (Carranza dixit)- con un cabezazo de ficción de Juan Pajuelo. A continuación un repaso de los más recordados en ese empate en el Morumbí.
LOS ¿'HÉROES'?
JULIO CÉSAR URIBE: Tras ser echado de la selección, el Tecos de Guadalajara mexicano lo acogió. Allí tuvo un arranque prometedor, pero con el correr de los partidos corrió la misma suerte de toda la vida: los directivos lo invitaron gentilmente a irse. Tras un largo periodo de lectura del 'Talán' del Trome, Cienciano del Cusco lo acogió. Con los rojos conseguiría el primer título de su carrera y volveria a dirigir al seleccionado. Su testarudez, su 3(5)-4(2)-1(2) -o algo así era su sistema- ante Bolivia y el catre kingsize que le obsequiaron algunos pupilos lo terminaron dejando fuera una vez más de la Videna.
MIGUEL MIRANDA: En ese partido no pudo contra el gol de Romario, pero cumplió un gran partido. Como empezaron a fallarle los reflejos, a 'Miguelón' le dieron las gracias en Cristal y tuvo que partir al Bolognesi de Tacna. Como en Ica necesitaban un arquero, Estudiantes de Medicina lo fichó para 2003, tras una multimillonaria operación. Al año siguiente, en la San Martín lo utilizaron como preparador de arqueros, pero le lanzaron la 21 para que la pegue de tercer arquero. Coronel Bolognesi presenció su muerte futbolística en 2007. Hoy es mano derecha de Reynoso y... preparador de goleros en la 'U'.
MARTÍN HIDALGO: Jugó aquella vez de lateral derecho y cumplió en la medida de sus posibilidades. No tuvo demasiados sobresaltos, pues los brasileños no anduvieron tan finos aquella noche. Luego de esa Eliminatoria siguió en el Vélez argentino y luego pasó efímeramente por Colón de Santa Fe. Saturn Ren-TV de Rusia, Alianza Lima, Libertad de Paraguay, y los brasileños Internacional y Gremio, fueron los paraderos siguientes del zurdo. Actualmente juega para el venezolano Táchira.
JUAN PAJUELO: Autor del gol tras centrazo de Tempone, Pajuelo ha pasado de la notoriedad que por ese entonces ostentaba el religioso zaguero. Pese a que se fue al descenso con Los Andes, Estudiantes de la Plata se fijaría en el para 2001. Para las siguientes Eliminatorias no sería llamado otra vez, pero eso no afectaría su vocación de trotamundos. México, Grecia, Arequipa fueron tres de sus últimos paraderos. Tras jugar Copa Perú con Inti Gas, zafó de la baja con el Juan Aurich. Por estos días es probablemente el Fabio Cannavaro de algún cuadro distrital.
GUSTAVO TEMPONE: El por entonces volante de Sport Boys, sin ser un dechado de virtudes, demostró esa noche porqué su zurda tenía un nivel de respeto también a nivel internacional. Ya había marcado un gol en la Libertadores ante Cerro Porteño y era lo mejor de Boys en ese torneo. La última vez que volvió al país fue en 2004 para el Vallejo de Trujillo. Fue desafectado y terminó su carrera en Aldosivi de su tierra natal. Pero volvamos al partido; era el minuto 77 y Romario ya había puesto en ventaja a los locales, pero Tempone -que había ingresado por el bailarín Percy Olivares- tuvo un tiro libre desde la izquierda. Situación perfecta para el argentino-peruano, desconocidísimo para los brasileños. Zurdazo y la cabeza de Pajuelo arrancaría no solo un grito, sino también carcajadas de ver lo gitanos que podemos ser. ¿En este encuentro también?
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