No juegues como el diablo

foto: Renzo Chumpén Espinoza / CorazónParaGanar.com

Sin ideas, sin orden, sin nada. Alianza Lima exhibió un rendimiento comparable al mostrado el 2009 y fue ampliamente superado por una Vallejo con el libreto aprendido. ¿Más que poner los pies en el suelo no hay que corregir nuestros severos errores?


Wilfredo Inostroza Valenzuela
[wilfredo.inostroza@corazonparaganar.com]

Cuando ya uno se acostumbraba a convivir lejos del fracaso, de las caídas, de las derrotas; cuando los triunfos obtenidos nos permitían vanagloriarnos ante nuestros detractores y calificarnos como invencibles, las dudas asoman otra vez, la desilusión vuelve a rondar por Matute y comienza a colmar de vacilaciones el corazón del hincha blanquiazul, ese que anhela recobrar el rumbo extraviado el martes en Chiclayo.

Los errores se pagan

Y como no dudar, si hoy se vio un calco del Alianza versión 2009, ese equipo que intentaba desordenadamente el triunfo, pero que en la mayoría de ocasiones con nulo éxito. Testigos del desatino de Gustavo Costas al utilizar el plantel alternativo cuando el adversario poseía las armas necesarias para vencer al rival que se presente en su camino, resulta ahora más comprensible explicar este momento. Hoy pesó más el millonario plantel del cuadro trujillano, que sometió a su antojo a un conjunto sin ideas, al punto de no permitirle réplica alguna.

Un rojo desaprobatorio

Aquella seguridad defensiva exhibida semanas atrás solo fue un grato recuerdo, los titubeos reaparecieron, producto de ello es que Roberto Demus convierte el tanto luego de una duda de los dos zagueros centrales, Vidal Sosa y Aparicio. Recién iban 15 minutos, quedaba mucho tiempo y el ánimo en Matute todavía no decaía completamente; incluso las posibilidades de remontar crecían cuando el ‘Vagón’ Hurtado era expulsado tras continuar una jugada que fue invalidada con anterioridad. La ausencia de Édgar González era aceptablemente suplida por ‘Koky’ Molina, hasta que la expulsión de Ovelar y la desesperación de Costas provocaron su salida. Fue un suicido.

Golpe del 'Poeta'

Tras un primer tiempo de un constante pero desordenado ataque blanquiazul, no era necesario contar con una bola de cristal para conocer el trámite del partido en los segundos 45 minutos. El local iba a atacar desesperadamente, mientras que el rival apelaría al contragolpe como arma para lapidar sus tentativas de remontada; precisamente luego de una jugada de riesgo en el área trujillana, entre Roberto Demus y Mayer Candelo armaron una jugada que culminó con el sutil remate del colombiano para anotar el segundo tanto y eclipsar toda huella de reacción para los íntimos. Con la pasividad de una zaga en donde destaca, no precisamente con celebridad, el paraguayo Héctor Vidal Sosa, las gambetas y amagues eran un recurso común para los de Viera. El ‘Mariscal’ (¿?) renovó su prontuario de desastres.

Nadie ha muerto todavía

Inútiles fueron los intentos por vulnerar a Joel Pinto, el resultado tranquilamente pudo ser más holgado si Saulo Aponte hubiese afinado su puntería en el entrenamiento de entresemana. Irrefutable triunfo del ‘Poeta’ en Matute, el cual permite el manifiesto del descontento popular y el retorno de las críticas. El crédito aún es extenso, el buen juego desplegado no puede desaparecer tan raudamente. Los sueños están intactos, esperemos que el rendimiento del equipo este acorde con los mismos para que estos no se conviertan en pavorosas pesadillas de las que ya no vale acordarse.