lunes, 24 de mayo de 2010

La Sub 18: Regateando hasta la meta

foto: Luis Crespo Euribe / CorazónParaGanar.com
Así se impuso Alianza ante un Regatas Lima que lo adelantó sorpresivamente en el inicio de la Liguilla de Oro. La miniblanquiazul no se amilanó y le puso calor futbolístico a la helada tarde en la cancha de los remeros. El 1-4 no mostró atenuantes.


Bruno Ortiz Jaime
[bruno.ortiz@corazonparaganar.com]

Y le pegó así, seco. Seco como esta tarde que te tensa los músculos y te invita al urinario. Estaba frente al balón y el murmullo de las 20 personas de las minitribunas de la primera cancha auxiliar del Complejo Regatas Lima no le hacían ni cosquillas. Ni siquiera el pasaje mental de su criticado hermano. Así le pegó Koichi, el más chico de ese clan ciertamente inefable, para abrigar en las redes a ese balón generoso.

Esta es mi casa por algo

Regatas estaba ansioso por volver a enfrentar a ese Alianza que no hace muchos meses atrás le había arrancado un triunfo a tropezones. Tenía sed de revancha, tenía ganas de tirarle el cabe mientras más veloz pareciera, y así le escupió la cara con ese penal que ganó apenas a los 12'. Aparicio fue a buscar un balón y derribó involutariamente a un rival. Para el árbitro Renzo Castañeda no habían dudas: era penal. Pietro Flores, uno de los rescatables del cuadro celeste, la mandó a guardar.

No tuvo Roach...e

Por eso Alianza empató muy rápido. Tan rápido que la escapada veloz de Chira y Roach ni siquiera fue advertida por el buen golero local, Hugo Madariegue (del banco de Alianza preguntaron por él). El empate estaría en el botín de Yves. No pasaría mucho y Alegría ya pondría el segundo, haciendo alegoría del buen momento blanquiazul en el partido.

Angustia blanquiazul

Porque Regatas se fue con todo al ataque tras el descanso. Y si no fuera por la poca sutileza de sus atacantes, el cuadro de Soto hubiera lamentado enormemente estos pasajes del partido. Las más claras pasaron por los pies de Flores y Bulos, quienes fallaron cuando su cuadro más los necesitaba. Alianza había perdido el balón de mitad de cancha hacia arriba y esto facilitaba el trabajo de los dirigidos por Richard Garrido.

Mano 'salvadora'

Para ambos, de alguna manera. El centro desde la derecha de Chira terminó en los pies del habilidoso Roach, quien con un amague se sacó a un zaguero regatista y definió de derecha, pero la mano de Alonso Urbina se interpuso. Penal y roja para el 3 local. Allí llegaría el momento del capitán, Koichi Aparicio. Zapatazo cruzado al palo derecho de Madariegue. Al rato, el último ingresante, Johan 'Ribery' Martínez haría honor a su apelativo descontando a medio Regatas y rematando cruzado para poner el cuarto y definitivo. Ya no había más frío.

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