lunes, 26 de abril de 2010

La Sub 18: Imposible detenerlos

foto: Jonathan Ruiz Román / CorazónParaGanar.com
Alianza impuso condiciones con amplitud y le hizo cinco a Cienciano jugando como local. Guerrero, Ramos, Alegría, Chira y Bayona fueron los cinco verdugos de los cusqueños.


Jonathan Ruiz Román
[jonathan.ruiz@corazonparaganar.com]

Suena el pitazo inicial, saque hacia atrás, los blanquiazules jugaban de local y ya buscaban en un pase de larga distancia a Renzo Alegría, quien no llega a empalmarla bien. La sorpresa en el partido llegaba con el debut de Aarón de la Barra, segundo arquero aliancista, y el regreso de Koichi Aparicio que apareció después de dos partidos. Nuevamente, Renzo Alegría tendría la opción de inaugurar el marcador sobre el inicio, pero tras sacarse al arquero visitante se quedó sin ángulo y le pegó desviado.

Gino el ‘Guerrero’

Alianza hacía suyo el balón, no dejaba nada al azar; Cienciano, por su parte, se perdía en un mar de errores, por lo que la goleada pudo llegar desde el principio. Pero los blanquiazules no estaban acertados... hasta que apareció Gino Guerrero, quien tras un centro por izquierda de Rodrigo Cuba lograba la recompensa al esfuerzo desde el minuto inicial. Más adelante, Aparicio tuvo en sus botines el segundo, pero definió mal. Aunque ahí no quedaría todo, el segundo tanto llegaría a cargo de Carlos Ramos, dándole una pequeña dosis de tranquilidad al conjunto blanquiazul.

Nada cambió

Para la segunda mitad se esperaba un Cienciano más aguerrido y capaz de corregir sus fallas, sin embargo fue de menos a peor, los dirigidos por José Soto hicieron lo que quisieron en el campo de juego, convirtiéndose en los dominadores absolutos de la cancha en base a toques y más toques. El arquero debutante era un espectador privilegiado: los rojos no tenían ninguna clara y se enredaban en sus propios errores.

Pudieron ser más

Con el rival moribundo, Alianza apretó el acelerador. Sin embargo, empezó a fallarse goles increíbles. ‘Pepe’ Soto no podía creerlo. Hasta que Renatto Chira logró tranquilizarlo al aumentar la ventaja con un soberbio remate. El juego se tornaba un tanto brusco. Cienciano no acertaba una pese a los cambios efectuados. Minutos más tarde, Carlos Bayona puso su firma para el 4 a 0, pero no era suficiente: el público quería más goles. Y así fue. El ‘blanco’ Renzo Alegría, quien había estado desafortunado toda la tarde, conseguiría su gol a poco del final. Cinco a cero categórico para seguir ilusionándose con estos disque chibolos, que hace mucho dejaron de serlo.

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