foto: Óscar Chambi Echegaray / CorazónParaGanar.com
Paul Medina Trejo
[paul.medina@corazonparaganar.com]
El balón descansa sobre el círculo blanco al medio del césped en el Matute. Los jugadores estiran las piernas, se relajan, piensan en ganar. El réferi indica el comienzo. Se desplazan los jugadores, se arman los 4-4-2 que ambos equipos plantean. El reloj aún no marca los dos minutos y Mendoza pone en aprietos a Libman. Ahí no más, Montaño se enfrenta a una tupida defensa ayacuchana. El partido promete.
El gol negado
Alianza avanza en estos primeros minutos del partido. Muestra por qué está en los octavos de la Libertadores. Inti Gas parece resignado a buscar un empate de visita, se relega en su área y espera por los pelotazos y los rebotes. Se apoya en Laura, guardavallas ayacuchano. Los victorianos, pues, le cogen el gusto y llegan, pero no hay definición. La defensa es fuerte y el arquero es diestro.
Un ‘Búfalo’ para romper
Ya en el minuto 23 se reducen las revoluciones de un Alianza que se ve frustrado por tener tanto el balón, llegar al área y no encontrarse con el gol. Intenta Claudio Velázquez. Nada. Vilchez cabecea, nada. Acaba la primera mitad con Velázquez sin definir frente a Laura. La segunda etapa empieza con cambios en el equipo íntimo. Costas apuesta por Ovelar. Los Vilchez comienzan a brillar y el ‘Búfalo’ que se busca sus propios espacios pero también se le niega el gol.
Basta de rezos
¡Gol! Costas grita. Montaño y Velázquez celebran. Tras un certero pase de Vilchez, Montaño la toca en primera y se la deja al ‘Karioka’ quien, tras sacarse de encima una marca, enfila hacia el centro y saca un potente disparo que se le filtra a Laura por la parte izquierda inferior del arco. La barra blanquiazul salta, grita, corea, en fin, revive. Los victorianos están envalentonados y quieren más. Más.
Epílogo light
Entra Marlon Negrete para Inti Gas y por fin se ve a alguien que escapa realmente hacia el área aliancista. El plantel victoriano está ensimismado, parece una tortuga que esconde su arco en un caparazón hecho de 11 defensas. Los íntimos, tras el gol, parecen un depredador desesperado por comerse la tortuga después de probarlo un poquito. No encuentra el espacio necesario y con el sabor en la boca acaba el partido. Qué apretado.
2 comentarios:
Ovelar es un pecho frío, arrugador que se largue de Alianza Lima
no me gusto mucho la cronica, ni tampoco el partido
Publicar un comentario