Lo canta desde arriba

foto: Joel Becerra Mundaca / CorazónParaGanar.com

Porque no quedaba otra, porque el cielo se había pintado del color de su piel morena pues hoy lo veía desde tribuna preferencial: en el cielo. Alianza le ganó 2-1 al Independiente Santa Fe colombiano y se lo dedicó, todo, entero, al blanquiazul que ahora alienta desde arriba: el ‘Zambo’ inolvidable.


Joel Becerra Mundaca, Corresponsal Norte


El día nos había cambiado de golpe. Que te deje de repente quien te había cantado tantos años para sentirte más blanquiazul no es un acontecimiento cualquiera, ni siquiera igualable a volver a ver la blanquiazul en tu tierra. Alianza había convertido su objetivo futbolístico y monetario a uno especial, místico, existencial. El ‘Zambo’ más querido en Matute había partido al mediodía y en la noche ya había asegurado un lugar desde lo más alto para gritar su primer triunfo desde allí. Felizmente, Arturo, no te fallamos esta vez.

Prendió el motor

Y la consigna parecía clara. Montaño echó a andar la máquina cuando la tuvo y buscó habilitar a un Velázquez que, sin dudarlo mucho, hoy debe haber jugado uno de sus mejores partidos desde su llegada a Alianza. El vértigo que le imprimió la blanquiazul al partido alcanzó a hombre como el paraguayo González, que dejó la impresión al arranque que no es tan malo como algunos catalogaron. Así el partido empezó a tornarse azul y blanco, el dominador era sin duda el cuadro de La Victoria; en esas circunstancias llegó el penal cometido -mal cobrado, pues debió validarse el gol posterior- a Velázquez por el portero Vargas. Aparicio y la posibilidad de abrir el camino al gozo no se fallaron esta vez. Uno a cero.

Por agua tibia

Mas esto no despertó a los timoratos colombianos. Apenas Javier Arizala asustaba por el lado del ‘Cardenal’ y tanto Gutiérrez como Arrechea eran promesas no cumplidas. No obstante, Alianza se dejó estar por momentos y cedió terreno para algunas incursiones visitantes. Así se gestó la primera y mejor ocasión colombiana de cara al arco de un sobrio Libman. No fue gol pero ya era un aviso de lo que podía pasar.

Cachetazo urgente

Alianza no hacía cambios para la segunda mitad y Costas parecía conforme con el orden evidenciado por ciertos momentos. Aunque Uribe dejaba en claro por derecha que a Corzo no lo pueden dejar ir así nomás y Vílchez se daba tiempo para mostrar lo mejor de su fútbol. En tanto, Leandro Fleitas, por su seguridad y hasta maña para trepar eficientemente al ataque, podría dejar en el banco lo que resta del año a José Moisela. Pero la cosa no iba tan bien en el juego colectivo para el inicio de la segunda mitad, pues la creación de fútbol decayó considerablemente y dio lugar a los contraataques. Fue de esa manera que Arrechea hizo la única jugada buena en su cuenta y forzó con Libman cuando debió marcar a placer; Gómez aprovechó el desconcierto y cedió a un Gutiérrez que marcó ante la débil resistencia de un Fleitas que quiso fungir de arquero.

Ahí está ‘KariOKa’

En el lamento, no se habían ni sacado las manos de la cabeza los muchos hinchas que llegaron al Mansiche cuando Fleitas trepó cual diez, enganchó para un lado y jugó en callejón con su paisano Velázquez, que definió con una sutileza inusitada. Gol de Alianza para gritarlo el doble: se le volvía a ganar a un cuadro internacional luego de mucho (el mismo que había dado cuenta de los deudores eléctricos a inicio de año) y el ‘Zambo’ seguro esbozaba una sonrisa tras la amargura. La blanquiazul volvía a creer y ya se podían hacer los cambios que se quisiesen.

El colofón

Puede decirse que los cambios no bajaron las revoluciones del partido; incluso Trujillo asustó dos veces con remates de fuera y los ingresantes estuvieron a punto de darle el empate a Independiente Santa Fe. No fue así y la victoria se quedó para los que la llevan como nombre de barrio. De La Victoria, de la gloria eterna, así como tú, ‘Zambito’ querido. ¡Arriba Alianza!