Una mano para ¿Dios?

foto: EFE

Y aunque algunos salgan puritanos a decir que poco o nada tuvo que ver, el boliviano René Ortubé se despidió de la peor manera del arbitraje y literalmente ayudó a Argentina a no ser humillado una vez más por la selección peruana, que a segundos estuvo de dejarla nuevamente fuera de un Mundial.


Wilfredo Inostroza Valenzuela


Era previsible, lo había declarado Johan Fano días atrás, habría que cuidarse de ese árbitro boliviano, pues todo hacía indicar que fue designado para favorecer a Argentina y evitar que se quede fuera del Mundial del próximo año. Los once de Diego Armando Maradona no fueron superiores a Perú (tuvieron la pelota pero no hicieron daño real), pero contaron con un aliado fundamental para llegar al triunfo: René Ortubé.

La memoria y las monedas

Días atrás lo más longevos nos recordaban la hazaña de aquel 1969, cuando con los inolvidables goles de ‘Cachito’ se eliminaba a Argentina en la mismísima ‘Bombonera’. Otros, menos veteranos, recordaban que Maradona jamás pudo con la selección peruana como jugador, y como entrenador la historia podría ser similar. Todas esas historias, provocaban en nosotros, lo más jóvenes, querer ser testigos de una gesta de tal magnitud, pues eliminar al bicampeón mundial no es un acontecimiento que se observa todos los días.

Se habló tanto sobre incentivos económicos para los peruanos, pero ellos lo negaron rotundamente, alegando que el honor y la gloria no tienen precio. Para ello ‘Chemo’ Del Solar enviaba una formación defensiva. Esperar a Argentina y jugar con su desesperación era la consigna. Los ataques locales eran constantes sobre el arco de Butrón. Se afrentaba la figura de Carlos Zambrano, quien era el abanderado del orden que mostraba el once nacional en el Monumental de Núñez y que mantenía en cero el marcador.

Del otro lado

Pero los pupilos del ‘10’ no desesperaban. Si bien el primer tiempo acabó sin gol alguno, la sensación que el tanto llegaría estaba latente. Fue cuando decide el ingreso de Martín Palermo, el ‘Loco’ era el as bajo la manga y el acompañante de Gonzalo Higuaín en la delantera, quien fue justamente, tras pase de Pablo Aimar, quien convirtió el primer tanto. El atacante del Real Madrid aprovechó el error de Amilton Prado, que no salió a tiempo y permitió a su rival quedar habilitado.

Si muchos pensaban que Perú se amilanaría con el tanto se equivocaron, pues con el mismo orden mostrado adelantaron ligeramente sus líneas, porque las falencias defensivas de los albicelestes eran muy notorias. El árbitro cometió su primer error al no marcar un penal luego de que un remate de Nolberto Solano impactará en la mano del defensor Emiliano Insúa. Penal claro, todos lo vieron, menos Ortubé.

Middley

Argentina renunció a atacar y esperaba el final, mientras que Perú, con sus limitaciones, buscaba igualar las acciones, pero parecía imposible. Una verguenza para aún mayor para una selección altiva que procura recordar siempre sus dos títulos mundial. Pero no imposible, cuando una lluvia torrencial azotaba el campo de River Plate y el encuentro agonizaba, una descoordinación defensiva en cancha argentina sería bien aprovechada por ‘Cachito’ Ramírez, que envió un centro perfecto que fue cabeceado por Hernán Rengifo. Igualdad y la pesadilla regresaba en el Monumental, Argentina se alejaba del mundial.

Pero la eliminación del dos veces campeón del mundo no puede ser permitida por la FIFA, es por eso la designación de una terna boliviana, encabezada por Ortubé, quien se despedía de la actividad internacional. Para colmo de males, del lado nuestro, Del Solar cometió quizá su última torpeza como DT patrio: cambiar a un jugador en pleno tiro de esquina final. Cuando expiraba el tiempo y se jugaban descuentos, luego de una confusión en el área, Federico Insúa enviaba un buscapié que fue interceptado por Palermo y que sin oposición alguna empujó el balón al fondo del arco nacional. Pero justamente el delantero de Boca Juniors al momento de recibir el esférico enviado se encontraba en posición adelantada, pues solo era habilitado por un rival y no dos como exige el reglamento. Error del altiplánico, que sucumbía con el esfuerzo y trabajo de un equipo con humildad que llegó a Buenos Aires a hacer historia, pero que terceros le quitaron ese sueño.

Déjalos ser

Otra vez cerca, pero con las manos vacías nuevamente, con el sinsabor de estar cerca del objetivo trazado sin poder alcanzarlo. Así se despede Perú de estas Eliminatorias, en una de las peores campañas de su historia, sin conseguir punto de visita, con el honor hasta el subsuelo y hasta con un robo a mano armada como el de hoy. Definitivamente hay que esperar que las próximas clasificatorias esto cambie. Solo falta un partido para que este martirio llamado irónicamente 'Rumbo a Sudáfrica 2010' llegue a su fin.